
5 razones de porqué la nevera no congela
¿Has notado un olor extraño al abrir la nevera a causa de alimentos descompuestos? ¿Notas que el refrigerador no está enfriando como de costumbre? Al igual que cualquier otro electrodoméstico, es normal que la nevera no funcione igual que en sus primeros años.
Pero, ¿qué pasa cuando una nevera no congela debido a una avería? La nevera es uno de los artefactos eléctricos más necesarios en la cocina, su funcionalidad y uso continuo nos facilita la vida. Un paro inesperado en su funcionalidad puede generar un gran problema en la conservación de algunos alimentos y carnes que necesitan mantenerse a cierta temperatura.
Existen diversos motivos por los cuales la nevera no congela, lo más seguro es que cualquier causa debe ser solucionada lo más pronto posible. A continuación te daremos a conocer 5 posibles razones del porqué la nevera enfría pero no congela.
Ten en cuenta que en cualquier caso debes ponerte en contacto con una empresa especializada para la reparación de neveras dañadas y mantenimiento de electrodomésticos en Medellín, como Serviluz Whirlpool, debido a que estos técnicos son los únicos que le darán solución eficiente al problema.
¿Por qué mi nevera no congela? 5 razones más comunes
1. Exceso de escarcha
Si la nevera es no frost puede llegar a hacer hielo en el congelador en muchas ocasiones debido a un problema con el termostato, el fusible térmico o el sensor de temperatura.
En estos casos, la ventilación del refrigerador no funcionará correctamente ocasionando una obstrucción y generando un escarcha en las paredes del congelador, evitando que enfríe de manera correcta.
2. Pérdida de gas refrigerante
La fuga de gas es una causa común que impide que la nevera funcione de manera óptima y se da cuando las tuberías que conducen hacia el compresor se rompen o se desgastan.
Dicha fuga es fácil de detectar gracias al olor extraño que emana una vez es liberado. Pero, si se trata de una fuga pequeña será difícil reconocer y podría causar daños al refrigerador.
Ten en cuenta que los técnicos son los únicos que cuentan con herramientas medidoras y los conocimientos necesarios para este tipo de trabajo, por ello es de suma importancia que ante esta alerta nos contactes de inmediato el equipo ya que inhalar este tipo de gas es dañino y peligroso para la salud.
3. Puerta dañada
Cuando las juntas de las puertas están desgastadas o la puerta se encuentra desequilibrada, entra más aire del permitido y produce un incremento de la humedad del interior, desestabilizando los rangos determinados de temperatura al tiempo que daña los alimentos así como también el funcionamiento del congelador.
En este caso la opción más viable es sustituir la puerta o encontrar el punto donde se produce el desequilibrio para detener el aumento de temperatura que impide el proceso de congelado.